sábado, 12 de junio de 2010

Fulcanelli su alquimia los nazis y los aliados

que es lo que a alquimia tiene o mejor dicho saben y apredieron a ya por antes y durante la segunda guerra mundial, porque los alemanes buscaron libro y todo a este tema, y mas extraño porque los aliados mataron a uno de los personajes considerados alquimistas, que es lo que quiso y OCULTA USA, al matar un alquimista.esto es lo que me pregunto????

actualmente eh asistido a clases de TAOÍSMO andino,si se que se preguntaran que eso, o a que se relaciona esta gente practicante de esta doktrina a este tema de alquimista, pues segun en conferencias que eh asistido y eh compartido diálogos con alguno de ellos ellos saben principios de alquimia y sus maestros guías son alquimistas, como lo es el señor KELIUM ZEUS y SAMAEL JOAB BATHOR
F.: ADMIN

Fulcanelli es el seudónimo de un autor desconocido de libros de alquimia del siglo XX. Se han lanzado diversas especulaciones sobre la personalidad o grupo que se oculta bajo el seudónimo.


Biografía

Es mucho lo que se ha escrito sobre la vida de este personaje, pero la mayor parte de sus biografías están basadas en testimonios inciertos, pues al parecer ocultaba expresamente toda información sobre su persona, propiciando la circulación de infinidad de rumores. Algunos han especulado sobre su posible nacimiento en 1877 en Villiers-le-Bel(Francia) y su muerte en la pobreza en París el año 1932.

Fulcanelli se movió hasta los años veinte del siglo pasado por Francia y ocasionalmente por España: País Vasco, Sevillay Barcelona. Para algunos era un personaje de vasta erudición con importantes contactos y relaciones con círculos selectos e influyentes, como Eugène Emmanuel Viollet-le-Duc, arquitecto y restaurador de catedrales góticas francesas, con quién compartió su admiración y estudio por el arte gótico, lo que le permitió interpretar con éxito el papel que laalquimia juega en las esculturas que adornan estas construcciones, muy especialmente las impresionantes representaciones en las gigantescas catedrales góticas (relieves, portadas, escultura, suelo, vidrieras).

La identidad de Fulcanelli, está por dilucidar. Incluso podría ser un seudónimo de un colectivo de alquimistas. El nombre de Fulcanelli parece estar relacionado mediante la cábala fonética con Vulcano-Hélios o bien con Vulcano-Hellé .

Con la escasa información y los comentarios de su discípulo y albacea Eugène Canseliet, diversos autores han adelantado varias hipótesis sobre su identidad:

Jacques Bergier menciona en su libro "El retorno de los brujos" que Fulcanelli y otro alquimista se dedicaron a visitar a los más conocidos físicos nucleares entre las dos Guerras Mundiales. Ambos describieron somera pero muy gráficamente en qué consistía un reactor nuclear y advirtieron de los peligros de las sustancias subproductos de las reacciones. Esto pasó sin mayores atenciones respecto de los científicos hasta que Fermi logró la primera reacción en cadena. Alguno de los visitados recordó, entonces, la conversación mantenida con alguno de los dos supuestos alquimistas y comunicó la historia a los servicios de inteligencia correspondientes. Inmediatamente los servicios aliados comenzaron la búsqueda de ambos personajes. Fulcanelli fue imposible de encontrar, mientras que la otra persona resultó fusilada en el norte de África por ser colaboradora de los alemanes. Es muy difícil hallar pruebas de tales cosas, más allá del texto del libro antecitado. Jacques Bergier fue ayudante del físico francés Louis de Broglie y formó parte de la inteligencia de los Aliados.

Si esto es cierto, es improbable que Fulcanelli fuera un científico conocido, pues hubiera sido reconocido por algún colega.

A partir de la búsqueda de estos dos personajes y del comienzo de la carrera hacia la construcción de una bomba nuclear los servicios de inteligencia compraron cualquier libro de alquimia que se pusiera a su alcance. No hay comprobación oficial a nivel público de estos relatos, pero tampoco ninguna desmentida conocida.

Obra

Fue autor de tres obras cumbres de la alquimia:

  • El misterio de las catedrales y la interpretación esotérica de los símbolos herméticos (Le Mystère des Cathédrales), escrito en 1922 y publicado en París en 1929.
  • Las moradas filosofales y el simbolismo hermético en sus relaciones con el arte sagrado y el esoterismo de la gran obra (Les Demeures Philosophales), publicado en Paris en 1930.

Para algunos pudo haber muerto en un desván de la calle Rochechouart de Paris sin terminar el tercero y último libro que iba a ser el colofón de su obra: Finis Gloriae Mundi, título inspirado en una pintura del pintor sevillano Juan de Valdés Leal que en la actualidad está colgada en la iglesia sevillana del Hospital de la Caridad. En ese libro se completaría la revelación del misterio alquímico o verbum dimissum (La palabra perdida) dando respuesta a los miles de años de búsqueda de los alquimistas.

En el año 2001 apareció en francés un texto con el título de Finis Gloriae Mundi como si fuese el texto que en su momento no se publicó. Para la mayoría de los estudiosos es un texto apócrifo ya que dicha obra relata sucesos que acontecen tras la segunda guerra mundial, fecha para la cual se supone al autor ya fallecido. No obstante, otros estudiosos del tema entienden que el elixir de larga vida no es en modo alguno una quimera de la alquimia, sino una de las pruebas de la consecución de la piedra filosofal. El autor de la versión revisada del Finis Gloriae Mundi afirma en la nueva publicación: " No es costumbre que un adepto vuelva a coger la pluma después de haber franqueado la transmutación (...) abandonemos el manto de silencio con el que se cubre quien pasa por las ascuas del fénix", sugiriendo precisamente esto.